jueves, 7 de septiembre de 2017

BANG GANG, ¿Historia de amor, o de reflexión?

BANG GANG: A MODERN LOVE STORY

Comenzaré diciendo que soy una gran espectadora del cine francés, me parece que siempre tienen un poco de todo en los guiones, risa, drama, amor, sexo, incertidumbre, y por esa razón es que cada año, religiosamente, mi mejor amigo y yo armamos un cronograma para poder ver todas las películas que se presentan en el ciclo de cine francés. 

En esta ocasión, ante la promesa de la mejor película de amor, y mayor aún siendo gran admiradora del cine francés, es que sometí todas mis expectativas a la película BANG GANG (no forma parte del ciclo de cine francés). Dicha película es el debut de la directora Eva Husson, y creo que para ser su debut, hizo lo necesario. Esta película, relata como es que el amor sale triunfante a pesar de las adversidades en las cuales se forja. Todo inicia en una escuela donde los alumnos son un tanto alocados, y en una de esas situaciones, donde llega el sentimiento de aventurero debido a las drogas, deciden jugar al BANG GANG, un juego de retos sexuales, de momento es tan hilarante que deciden hacerlo continuamente, hasta que un día, como todo en la vida, llega la factura, traducida en enfermedades de transmisión sexual. 

No puedo decir que ha sido la mejor película que he visto, no superó mis expectativas, pero si creo que de cierto modo, nos muestra algo que los padres de hoy en día se niegan a ver, y es que la sociedad vive una podredumbre tal, que los adolescentes buscan llenar vacíos en las acciones más absurdas, con consecuencias realmente considerables, como afectar su propia salud. 

Muchos dirán "eso solo pasa en Europa y en EEUA", pero lo cierto es que en México, tal vez, estamos peor, porque la necesidad de elevar el nivel de vida, ha hecho que los padres de familia se dediquen a proveer la casa, y desatender a los hijos, y dónde van a encontrar atención estos adolescentes, pues en otras personas, que no necesariamente les darán aquello que buscan, o no de la manera como debiese entenderse, y todo se resumen a una intensa necesidad de atención. 

No soy una mojigata, pero habría que reflexionar ¿hasta dónde va a llegar esta crisis social que estamos atravesando?, ¿qué estamos haciendo para salir a flote?, ¿solo nos estamos dejando llevar por la corriente?, ¿qué pasará con las siguientes generaciones?. Personalmente, estas preguntas me las hago día a día, sobre todo cuando veo a mis alumnos, y pienso que de ellos algún día dependerá mi salud, mi economía, y mi bienestar social. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario